Ezequiel Garay se equivoca de enemigos

“Qué fácil es hablar sin saber”, con unos emoticonos que te dicen que te calles. Ese es el mensaje de Ezequiel Garay, el jugador del Valencia, que ha generado un revuelo innecesario porque el argentino equivoca el enemigo de pleno. Aquí no hay ninguna campaña contra nadie, y menos contra él, pero si sólo ha jugado el 60% de los minutos oficiales del equipo desde que llegó al club de Mestalla hace más de dos años, que tienen una tendencia a pequeñas lesiones que le cortan cualquier tipo de regularidad, que no juega casi nunca más de 5 encuentros seguidos, que es el defensa que más cobra y el que más ha costado de traspaso, y que encima ahora vienen muchos meses de jugar domingo, miércoles, domingo, habrá que preguntarse qué es lo que ocurre. Y que nadie establece una caza de brujas, que no se trata de eso, sino de saber para poder informar.

El palo que da no es a nadie y es todos, y tampoco es forma, porque al final lo que importa es qué le pasa, porqué le pasa y cuándo demonios le va a dejar de pasar. Porque eso es lo que le preocupa al personal, lo que nos puede ocupar a los medios, ya que nosotros somos los que se lo contamos después a los aficionados. Y si efectivamente hablamos sin saber, que nadie ha dado nada por sentado, sino que se hacen preguntas al aire porque los datos son los que son, que alguien del club, o el propio Garay, salga y explica lo que ocurre, dando normalidad a todos los procesos. Ni más ni menos.