Bofetón de realidad para el Valencia (2-0)

Partido para reflexionar y aprender el del Valencia en Cornellà, los de Marcelino empezaron bien pero en la segunda mitad se vinieron completamente abajo y el Espanyol sentenció con una falta de Granero y un tanto de Borja Iglesias tras un error clamoroso de Piccini.

Santi Mina fue el acompañante de Rodrigo en punta de ataque, el gallego estuvo decepcionante al igual que la mayoría de los jugadores. La calidad de Rodrigo y el empuje de Gayà permitió al Valencia dominar en la primera media hora. Las llegadas fueron constantes y los de Marcelino merecieron adelantarse, se reclamó un penalti por manos en el área espanyolista. Poco a poco el equipo de Rubi fue ganando metros y el Valencia mostrando inseguridad en defensa. Neto salvó sobre la línea la mejor ocasión de los locales.

En el segundo acto el Valencia hizo aguas. Imprecisos Diakhaby y Paulista, desaparecidos Parejo y Soler, el Espanyol se hizo fuerte y encontró el camino del gol en el minuto 62. Granero lanzó de forma magistral una falta desde la frontal del área, el balón rebotó en el travesaño y botó dentro de la portería de Neto. El Var tuvo que resolver la acción. A partir de ese momento los nervios crecieron en el Valencia y los de Marcelino murieron tras una jugada infantil en la que Piccini regaló el esférico, Borja Iglesias no perdonó. Saltaron al campo Gameiro, Cheryshev y Batshuayi, pero ya era tarde para arreglar un encuentro que hace daño y que deja al Valencia en una situación preocupante tras haber sumado solo un punto de los primeros seis en La Liga.