La vida del Valencia sin Kondogbia

La vida del Valencia sin Kondgobia no será fácil, aunque sólo sea un partido por acumulación de amonestaciones. El francés se ha perdido el estreno liguero ante la Unión Deportiva Las Palmas, donde el entusiasmo de todos fue clave para la victoria, y el choque contra el Athletic de Bilbao, también en Mestalla, donde se ganó por la pegada valencianista, pero dando la sensación de que el choque estaba muy suelto, abierto, muy poco controlado. Ese día se decidió firmar otro medio centro, o al menos peinar el mercado en su búsqueda, porque si algo tiene claro Marcelino es que el año va a ser muy largo y exigente, y aunque se cuenta con ventaja sobre el quinto, mantenerla hasta el final no va a ser nada fácil. Aunque la posición que se tiene, y así hay que decirlo, es de auténtico privilegio.

La solución a corto plazo, a día de hoy, aunque en este mismo momento se puede estar fraguando el fichaje de ese medio centro que todo el mundo tiene claro que falta, es que Maksimovic juegue junto a Dani Parejo en el doble medio centro. La alternativa que se dispuso en su momento fue Carlos Soler, aunque al canterano, de momento, lo único que se le puede pedir es que esté repuesto de su lesión cuanto antes, porque hace falta, mucha falta. Con Kondogbia también se ha jugado mal, también se han perdido partidos, y los dos sin él han terminado con victoria. No, esto no va de resultados, que puntualmente pueden ser unos u otros. Va mucho más allá, aunque ojalá este fin de semana no echemos de menos al gigante francés y se pueda ganar fuera de casa de nuevo, algo que ya hace demasiadas jornadas que no pasa.