Fichajes Valencia 2018: el problema nunca es vender, sino tener cerrado el repuesto

“El Valencia nunca debe tener miedo de vender jugadores, pero lo que siempre debe tener preparados son los fichajes que deben suplir a los que se vayan”. La frase no es de ningún personaje del entorno del club de los últimos tiempos, sino de Javier Subirats, uno de los tipos con menos prensa y más méritos de la historia de este club. Artífice del mejor Valencia de todos los tiempos, le tocó lidiar con una exigencia bestial y con la necesidad de vender cada año a las estrellas del equipo. Y lo consiguió. Como él mismo dice, siempre es necesaria una cierta dosis de suerte, que los rivales suelen ser Madrid y Barcelona, pero lo que siempre tenía claro es que en su cabeza debía estar siempre la plantilla del curso siguiente, supliendo a aquellas piezas que fueran susceptibles de salir por estar haciendo un gran año y por las que se fueran a recibir ofertas por encima de mercado.

Es más que posible que este verano el Valencia reciba ofertas brutales por algunos de sus jugadores si el año sigue como va. y como dice “Subi”, eso no debe dar ningún miedo. Lo que se tiene que tener claro es quién puede venir si alguien se debe ir. Pongamos un ejemplo que sea claro y extremo: si un club paga los 80 millones de la cláusula de Carlos Soler. Cifras de la Guerra de las Galaxias, que se debe tener lista para invertir en dos jugadores de primer nivel que taparan ese hueco, y en dejar una parte en caja “por si acaso”. Nadie dice que se vaya a vender a Soler, pero es un caso práctico para que se entienda que el problema nunca es traspasar, y más a precios desorbitados.