El cambio de Simone Zaza y la reacción con Marcelino

El jugador tenía a mano un récord histórico del club, pero el técnico asturiano decidió cambiarlo con el marcador 2-0 favorable

Toni Hernández | 04 NOV. 2017 | 15:00

El Valencia gana 2-0, corre el minuto 78, y en Mestalla suena el “run run” de que falta el gol de Simone Zaza, el que supondría 7 jornadas seguidas marcando, un récord histórico del club. Tal cual está el partido, se necesita velocidad, buscar la espalda del Leganés, que empieza a estar volcado. Marcelino decide dejar en el campo a Rodrigo y dar entrada a Mina, sacando del verde al gigante italiano. Se va serio, enfadado, sin saludar a nadie y rumbo al vestuario ante la mirada y enfado de su entrenador. Lo ve todo el mundo, lo captan las cámaras, que es lo peor de todo, y se abre el debate que no debe existir. Esto es un deporte de equipo, la ambición está bien, pero vale más no marcar hoy y lograr el tanto de la victoria contra el Espanyol en la siguiente jornada. Pero no ocurre nada, no hay desplantes o faltas de respeto, NADA.

Zaza es así, no es algo nuevo ni que pueda sorprender a nadie, y Marcelino lo tiene claro como el agua. Es todo corazón para lo bueno y para lo malo, y cuando tenga claro que algunas cosas le sobran, puede ser uno de los mejores en su puesto, porque centrado y calmado es una verdadera delicia verle jugar, y cómo permite jugar a sus compañeros. No me importa lo que venga ahora, explicaciones, desmentidos, “es que yo quería decir”, “es que pareció que”, eso me da igual. Zaza debe entender que el equipo está por encima de él, y cuando eso lo aplique siempre, sin perder sus ganas de triunfar, será uno de los mejores. Y ojalá sea aquí, porque todo el mundo, el entrenador el primero, le va a ayudar.