Mateo Alemany, el hombre discreto

Quizá otros perfiles estarían sacando pecho en una situación deportiva como la que se está viviendo, pero el balear ha venido aquí a trabajar

Toni Hernández | 02 NOV. 2017 | 07:30

Mateo Alemany o el perfil de un gestor de club profesional discreto. Tener gente así en el Valencia no es lo habitual, y aunque ha habido muchos en la historia, también en la reciente pero era más fácil pegarles palos porque no salían a defenderse para no dar más carnaza, es tan importante como que las cosas vayan bien. Al equipo le está funcionando todo en el terreno de juego, y esto al final es la llave que abre la puerta de la tranquilidad, de la paz y del sosiego para el entorno, lo que permite en definitiva trabajar de una manera normal y no estar todo el día apagando fuegos en todas partes, que es lo que ocurría hasta hace bien poco. Si un dicho del fútbol es que “si la pelota entra todo va bien”, y tiene tanta vigencia, igual habrá que hacerle un poco de caso.

Y además hay otro punto que me parece muy importante. Alemany sabe de qué va la película, sabe que el éxito en el deporte es efímero, eso por un lado, en el fútbol, si no eres Barcelona y/o Madrid más, y que además, el club tiene muchas más obligaciones por encima de esa. Que sí, que no tienen glamour, que no visten tanto, que pasan a un segundo o tercer plano si se está arriba en la tabla, pero el campo hay que terminarlo, la multa de la Unión Europea, Porxinos, vender el actual Mestalla, cuadrar número, preparar la Junta del día 10… y eso también le toca a él.