Gonçalo Guedes terminó desquiciado en Mendizorroza

Gonçalo Guedes ha sido una de las grandes sensaciones en el comienzo de La Liga, el Alavés recibía a un Valencia en racha y era consciente de que anulando al portugués tendría más posibilidades de lograr un resultado positivo. Los defensas vitorianos se emplearon con total dureza y el árbitro no supo frenar a tiempo la violencia excesiva, Guedes tendrá que comenzar a acostumbrarse a estar en el punto de mira.

Fue un encuentro muy táctico y duro en todos los sentidos. El Valencia se llevó los tres puntos pero tuvo que sudar para poder ganar en Mendizorroza, la afortunada acción del penalti abrió el camino cuando peor pintaban las cosas. Ayer Gonçalo Guedes no pudo brillar, al menos estuvo muy lejos del nivel mostrado en los últimos encuentros. Gran culpa de ello la tuvo la excesiva violencia mostrada por el Alavés, cada vez que Guedes tocaba la pelota tenía a un oponente cerca y en muchas ocasiones terminó en el suelo. El colegiado no frenó con tarjetas esta actitud y en el segundo tiempo el luso salió del partido absolutamente desquiciado.

Parejo es otro futbolista que está sufriendo duros marcajes, pero su ausencia en Mendizorroza provocó que Guedes fuera el gran objetivo. El portugués es un jugador temido y no tendrá demasiada libertad de aquí al final de temporada, pero es un aspecto que debe asumir para seguir creciendo. Marcelino optó por sustituirle en el segundo tiempo ya que sin espacios y sensiblemente afectado no estaba en condiciones de brillar. Guedes fue el blanco de los defensas del Alavés.