Soluciones para cortar la hemorragia defensiva

El Valencia ha encajado siete goles en los tres últimos partidos, una media de más de dos por encuentro. Marcelino está muy preocupado y hay que poner soluciones

Jose Hernández | 19 OCT. 2017 | 08:31

Los buenos resultados no deben tapar el gran problema que se ha encontrado el Valencia en los últimos encuentros, la cantidad de goles encajados. El equipo ha sorprendido a todos por su manera de ganar partidos, ya que nadie esperaba que ofreciera esa pegada en ataque y fragilidad defensiva. El Valencia ha encajado una media de más de dos tantos por encuentro en sus últimas actuaciones, Marcelino es consciente de que no es el camino a seguir ya que será difícil mantener la efectividad actual en ataque.

El técnico del Valencia está apostando por las rotaciones en la zaga, pero es posible que tantos cambios en la línea defensiva estén perjudicando al equipo. No obstante, los problemas no vienen provocados exclusivamente por los centrales. Si bien es cierto que el Valencia es letal al contragolpe y tiene minutos en los que parece imparable, también hay que reconocer que sufre lagunas y periodos de desconexión en los que la intensidad no es la apropiada. Este punto es el que más preocupa a Marcelino ya que en los dos últimos encuentros fue evidente.

Ante el Athletic el equipo sufrió muchísimo y los de Ziganda crearon demasiadas ocasiones al margen de marcar dos goles, y frente al Betis se vivió una situación inexplicable con los tres goles locales en cinco minutos. Es hora de ponerse manos a la obra y corregir este defecto para que el Valencia sea todavía más competitivo. No es ninguna tragedia pero dentro de la euforia general no se debe perder la perspectiva y olvidar aspectos negativos.