Un Valencia letal en las transiciones

Rigor defensivo, buena disposición de los jugadores y excelente presencia física, son las armas del Valencia de Marcelino. Pero también es justo señalar uno de los factores que están favoreciendo que el equipo sea más peligroso en ataque, la buena salida de balón tras robo y la facilidad con la que los jugadores pisan el área rival en este tipo de acciones. Si exceptuamos el encuentro ante el Atlético, los de Marcelino crearon mucho peligro de esta forma en el resto de actuaciones.

Kondogbia es un auténtico muro en el centro del campo. El francés roba muchos balones y suele distribuir con criterio en acciones rápidas. Es una variante a los ataques pausados de Parejo, y algo que de momento está generando buenos resultados. La rapidez de futbolistas con llegada como Carlos Soler o Rodrigo suele sorprender al rival, aunque la eficacia ante portería fue el gran hándicap. Frente al Málaga se explotaron las transiciones en el segundo tiempo, y en este aspecto hay que destacar a otro futbolista, Guedes. El portugués hizo mucho daño por su banda y piso área con frecuencia.

Con marcador a favor y en encuentros en los que el Valencia realice un juego de contención y vigilancia pueden llegar muchos goles en este tipo de acciones. Por ejemplo, en el Santiago Bernabeu Simone Zaza dispuso de varias contras muy claras que de haber estado acertado podrían haber hecho que el Valencia se llevara los tres puntos. El equipo está en fase de construcción pero ya se perciben muchos aspectos positivos.