Las miserables ganas de que a este Valencia le vaya mal y fracase

El Valencia cierra 4 fichajes y consigue armar una plantilla competitiva que pueda luchar un puesto en Liga de Campeones. ¿Alguien imagina un titular así en la prensa de esta ciudad aunque lleguen los hombres que el club está trabajando y que están muy cerca de llegar? No, nadie, y quien diga que lo hace, no le llamaré mentiroso, pero sí alguien muy optimista. Se percibe en el ambiente, en ciertos ambientes, unas ganas de que todo vaya mal que da vergüenza, incluso asco, porque la crítica siempre es sana, es constructiva aunque no sea justa porque te aprieta las tuercas, pero hay cosas que no se sostienen. Desde hace semanas, el Valencia a través de Mateo Alemany y Marcelino García Toral, lleva diciendo que el mercado será largo, que la fecha es el 31 de agosto, y que se sabe que algunas cosas serán en el último momento.

Es 12 de agosto, la presentación fue el 11, y quien quiera poner el grito en el cielo porque pasó lo que todo el mundo en el club había anunciado que iba a pasar, está en su derecho, pero es absurdo de todo punto. Se le intenta envenenar a Marcelino en cada rueda de prensa, con esas apuestas que existen sobre cuándo dimitirá que debería hacer que a muchos se les cayera la cara de vergüenza al suelo. Van a llegar 4 fichajes, es posible que 5, y la plantilla va a ser competitiva, con un entrenador que lo tiene todo muy claro, y con un dueño que apoyo de forma incondicional su proyecto. Hace falta ser muy torpe, muy mala gente y muy indeseable para querer que todo vaya mal. Y eso no significa tener que decir que todo va a ser de color de rosa, que hay algunos que sólo saben vivir en los extremos.