La demagogia barata con Peter Lim y el Valencia

Peter Lim y las redes sociales, twitter, Facebook o instagram, son una mezcla más explosiva que los adolescentes con tarifa plana en el móvil, porque todo lo que le ocurre al dueño del Valencia y es subido al universo virtual, lo relacionado con el Valencia y el fútbol especialmente, se convierte en un motivo de debate, muchísimas veces exagerado y oportunista, que no aporta nada más que algún rato absurdo de encendida discusión. Y es que si cuando se hace una foto con un señor que lleva una camiseta firmada de Cristiano Ronaldo (que igual era un amigo suyo que se le había pedido, y más de uno se sorprendería de los valencianistas que hacen el mismo encargo cuando se juega contra el Madrid, que nos conocemos todos), hay que colgarlo del palo mayor y sin piedad, cuando celebra su 64 cumpleaños con una tarta que llave el escudo del Valencia, ¿hay que darle la insignia de oro y brillantes?

El tema se contesta solo, porque lo demás es demagogia barata, pura y dura, más vieja que andar. Porque al final, si Marcelino García Toral es el nuevo entrenador del Valencia, y me sigue pareciendo sorprendente la unanimidad con respecto a su elección, es por Peter Lim igual que cuando llegaron Gary Neville o Pako Ayestarán. Y si en unos casos llovían chicos de punta, con razón, ¿ahora qué hay que hacer? Lo dicho, demagogia de todo a cien, porque al final, esto se resumen en ganar partidos. Nuno, el primero ganaba partidos y era bueno. El segundo no, Los demás no han ganado partidos, no sirven. Marcelino, si gana partidos, será bueno. Y así siempre. Camisetas, tartas y fotos de redes sociales al margen.