Adiós temporada 16/17, adiós, y no vuelvas nunca a Valencia

El Valencia pone fin a la Liga 16/17, que ha sido menos dura por los miedos que la 15/16, donde el descenso fue un posibilidad más que real entrada la segunda vuelta, pero en la que todo lo que ha ocurrido a todos los niveles, deportivos y no deportivos, ha hecho que sea mucho más duro y vergonzosa aun que la anterior, aunque el hecho de llover sobre mojado también ha sido un problema añadido. Todo ha salido mal, al menos hasta el pasado mes de enero, cuando Prandelli el cobeado y mentiroso decidió marcharse del club y hacer el favor del siglo, seguido de su amigo/enemigo Jesús García Pitarch, con lo que Peter Lim y Meriton podía dar rienda suelta a un plan que llevaban preparando desde el mes de noviembre y que por fin pudo tomar todo el cuerpo que le hacía falta y era básico para la entidad.

Lejos del planeamiento de ser un año para olvidar, no lo es en absoluto, ya que más vale no repetir los errores cometidos y aprender de ellos, pero esta vez en serio, de verdad, no sólo de boquilla, porque volver a pasar por lo mismo de nuevo puede ser una tortura que nadie aguante, y con toda la razón del mundo. Si cuando el árbitro pite hoy el fin del partido, Mestalla quiere sacar pañuelos blancos, estará en su perfecto derecho, aunque más que sensación de enfado, que esa tuvo su tiempo, toca una de alivio y de ponerla buena cara a lo que está por venir.