La afición no olvida las cuentas pendientes con el Villarreal

El domingo finalizará un campeonato de liga para olvidar, el Valencia cerrará una de las campañas más duras de su historia y no existe mejor noticia que dar por finalizado un ejercicio que ha traído muy pocas noticias positivas. Antes de ello el equipo recibirá al Villarreal en un encuentro intrascendente para los de Voro pero en el que el equipo de Castellón se juega su acceso a competición europea.

En poco más de 19 años el Villarreal ha pasado de ser un club simpático para el valencianismo a convertirse en el gran rival de la Comunidad Valenciana. La situación es circunstancial pero en este momento el conjunto amarillo se encuentra varios peldaños por encima de los de Mestalla. Es algo que no gusta a la afición, pero que está propiciado por la mala gestión que ha tenido el club en los últimos años a diferencia del Villarreal. De aquellos primeros choques en los que las dos aficiones acudían hermanadas al estadio poco queda. Las polémicas y desprecios entre jugadores y entrenadores de uno y otro equipo han generado un ambiente de crispación.

El Valencia nunca es bien recibido en el estadio del Villarreal y todavía se recuerdan los inoportunos mensajes de futbolistas como Roberto Soldado la pasada campaña. No cabe duda que la mayoría de la afición de Mestalla terminaría el año con una pequeña sonrisa si una victoria del Valencia dejara al conjunto amarillo sin conseguir la plaza europea por la que luchan. Es un hecho incuestionable que la "germanor" entre los dos clubes más importantes de la Comunidad Valenciana no existe.