El futuro del Valencia, sin que a nadie se le vaya la cabeza

Es el futuro del club, es el presente, ha mejorado y blindado su contrato, pero se debe seguir teniendo paciencia con él

Toni Hernández | 18 MAY. 2017 | 00:03

El Valencia ha cerrado el fichaje más importante de la temporada 17/18, otra vez, ya que el contrato de Carlos Soler ha sido medicado por segunda vez en lo que va de año, de forma justa y para evitar sustos, aunque como suele pasar, esto siempre depende de la voluntad del jugador. Que el catearon siga vinculado contractualmente al Valencia, que la cláusula sea más alta y que el sueño de toda una vida sea realizad es perfecto, lo debe ser y como deber ser, aunque por supuesto, porque ha habido voluntad por ambas partes. Ahora, con la fácil hecho, porque si, esta es la parte sencilla, viene la delicada, la de la paciencia, la de tener los pies en el sueño, la de entender que Carlos Soler es un crío en proceso de formación en todos os aspectos por muy maduro que pueda ser.

Es posible que el año que viene no sea tan brillante como este, que luzca menos, que sea menos espectacular. No será la novedad, le conocerán mucho más y su rol será el de jugador importante con responsabilidades, no el de joven imberbe para ponerlo todo del revés. Si el año que viene no vemos a un Soler estelar, calma, no empecemos a decir aquello de que “desde que firmó el nuevo contrato se ha acomodado”, porque crecer tiene sus fases, y el joven futbolista del Valencia ya se ha saltado alguno por su precocidad en todo. Tengamos calma, que hay jugador grande, pero no deja ser un niño, que a nadie se le olvide.