El futuro de Rodrigo y su posición en el campo

Una asistencia y un gol en apenas cinco minutos sirvieron para que Rodrigo Moreno volviera a sonreir ayer como valencianista en su vuelta a Mestalla tras varios meses lesionado. El hispano-brasileño completó un gran partido y tuvo incidencia directa en dos de los cuatro goles del equipo ante el Osasuna. Una actuación con la que el futbolista recordó sus mejores virtudes y al Rodrigo de los primeros partidos en el club valencianista, aquellos que le sirvieron para ir convocado con la Selección Española de Vicente del Bosque. El delantero, preguntado por su futuro al final del partido dejó claro que "los que estemos aquí vamos a tratar de volver a hacer un Valencia competitivo. Yo quiero seguir, es una pena que las cosas no hayan salido bien estos dos años complicados, pero no me rindo, me gustaría vivir la parte bonita del Valencia”.

Y es que la situación de Rodrigo es complicada. Llegó al Valencia previo pago de 30 millones de euros, un precio que nunca ha compensado con su rendimiento. Vino para ser titular indiscutible y durante tres temporadas no lo ha conseguido. Ni de nueve puro, ni pegado a la banda, Rodrigo no ha despuntado en el Valencia. Sin embargo, su entrega y su comportamiento son modélicos, además de ser un jugador muy querido en el vestuario que nunca ha creado problema alguno. Sin embargo, sus destellos de calidad, como los que vivimos el domingo en Mestalla le pueden valer una nueva oportunidad, y es que, al fin y al cabo, nunca ha jugado en su posición, la de segunda punta, para poder demostrar que sí que vale para este equipo. Además, ahora, tiene un delantero centro como Simone Zaza a su lado, algo que le puede venir a la perfección para lucir con su juego de asociación y verticalidad. La sociedad con el italiano puede convertirse en una noticia realmente positiva para el club, algo que deberá probar en los dos partidos que quedan. De funcionar, Rodrigo podría ganarse su estancia, al menos durante una temporada más, en el club ché.