El enésimo bochorno del Valencia (1-4)

El Valencia se despedirá de la Copa del Rey tras ser goleado y humillado por el Celta de Vigo en su propio estadio. Los de Voro ofrecieron una imagen muy triste

Jose Hernández | 03 ENE. 2017 | 20:48

El Valencia fue derrotado por el Celta de Vigo y dice adiós a la Copa del Rey aunque todavía le resta el encuentro de Balaídos, un partido que será un trámite tras el 1-4 de Mestalla, Los gallegos golearon jugando a medio gas y terminaron llevándose una victoria muy cómoda ante un equipo roto. La afición de Mestalla estalló en varias ocasiones debido al dramático nivel que ofrecieron los jugadores en el terreno de juego.

Voro apostó por Javi Jiménez y Mario Suárez en el centro de una zaga que tuvo muchos problemas en la primera parte. El partido no pudo comenzar de manera más fatídica ya que el debutante Jiménez cometió un penalti que Iago Aspas transformó. Otro encuentro sin mantener la portería a cero y una forma lamentable de comenzar 2017. El Celta dominó el partido a placer y jugó con una marcha más que el conjunto de Voro. Esta vez el técnico valencianista no pudo imprimir una dosis extra a unos jugadores que parecieron muertos durante el primer acto, todavía más cuando Theo Bongonda finalizó una contra bien trenzada y convirtió el segundo gol tras un disparo ante el que nada pudo hacer Jaume Doménech. Mestalla estalló y se escucharon cánticos contra Peter Lim. El centro del campo valencianista no era capaz de conectar con los hombres de arriba e incluso el equipo vigués pudo ampliar la ventaja en una lanzamiento de falta que Jaume detuvo con ciertos problemas.

El tercero de los visitantes llegaría antes del minuto 20 en una acción por banda izquierda del Celta. El pase interior rozó el fuera de juego pero Daniel Wass fusiló de nuevo a Jaume. Ni los más pesimistas del lugar podían creerlo. El Valencia intentó reaccionar sumando efectivos en ataque, pero el caos y la ineficacia fueron absolutos.Tras el descanso Voro intentó introducir sabia nueva al campo y dio entrada a Carlos Soler. La actitud fue diferente y antes del primer cuarto de hora llegó la reacción gracias a una jugada en la que Rodrigo se plantó solo ante Sergio Álvarez, el portero vigués desequilibró al delantero valencianista, que no pudo disparar entre los tres palos. El árbitro señaló penalti y Parejo transformó sacudiéndose la presión del momento.

El tanto espoleó a Mestalla y la afición despertó soñando con la remontada, pero el Valencia le puso más corazón que cabeza. Bakkali salió al campo por el desaparecido Medrán y el encuentro entró en una fase de juego brusco. En una acción combinativa el conjunto de Berizzo volvió a ver portería, Guidetti dribló a Jaume Doménech y finalizó con clase. Con muy poco el Celta seguía demostrando su superioridad en el terreno de juego. Bakkali y Munir intentaron llegar por banda y Voro introdujo a Rafa Mir como último recurso.Munir intentó recortar distancias minutos después y gran parte del público decidió que ya habían visto bastante. Imagen muy triste con los aficionados desfilando hacia sus casas a pocos minutos del final. Al final un gran disgusto y pañolada general.