Ganar es ganar, y el Valencia necesitaba ganar a quien fuera

El equipo está huérfano de auto estima, de confianza, y eso en el fútbol sólo se consigue con triunfos, en la competición que sea, contra el rival que sea

Toni Hernández | 29 NOV. 2016 | 21:50

Cuando un equipo necesita ganar, el rival que haya delate, la competición que se juegue, da lo mismo, porque ahora el Valencia tiene un enemigo mucho más poderoso que el mejor equipo del mundo: el Valencia. Y jugar contra ti mismo es difícil, tienes dudas, no confías en lo que haces, cualquier problema se convierte en tragedia, y eso, el rival, lo único que puede hacer es agravarlo más o menos, pero nunca provocarlo. El problema del Valencia es el Valencia, ni jugar contra el Sevilla cansado por la Champions o el Leganés con suplentes dejando la Copa del Rey pasar. Por eso, la primera parte hay que valorarla mucho, porque se hicieron dos goles, se jugó modernamente bien, y el equipo dio sensaciones positivas, mucho más que en muchos partidos hasta la fecha.

¿Que la segunda fue peor? ¿Que fue un desastre? Si, es así y hasta es normal, porque todo responde a ese proceso de histeria que arrastra el equipo. Encajar gol afea el partido, que no dieran el 0-3 legal a Garay también, pero lo cierto es que el Valencia debía salir de Butarque con mejor cara de la que entró, con una victorias más de las que tenía al llegar, y eso era lo realmente clave. La defensa de 3 se consolida, y aunque como en todo sistema queda ajustar cosas, que se repitan inercias y conceptos siempre es bueno, positivo, porque hay que crecer. Munir es un buen delantero, nadie lo niega, y sería perfecto con ese 9 que el Valencia anda buscando. Motivos para creer, ganas de creer.