Las razones por las que el Valencia quiere el fichaje de Gonçalo Guedes

Hace apenas 3 meses era un rumor al que nadie daba crédito, y ahora es una operación que el Valencia estudia mucho más que en serio

Toni Hernández | 27 OCT. 2016 | 09:36

Gonçalo Manuel Ganchinho Guedes, Benavente, Portugal, 29 de noviembre de 1996, o simplemente Gonçalo Guedes, es un nombre que empezó a sonar con fuerza el 31 de agosto de este mismo año para ser fichaje del Valencia. El día del cierre del mercado se especuló con que el club de Peter Lim podía firmar a otro pupilo de Jorge Mendes, y aunque incluso García Pitarch lo desmintió, lo cierto es que es el marcaje al delantero o extremo del Benfica sigue, ya han ido diversos técnicos a verlo, y los informes que tiene el club no pueden ser mejores. Su cláusula son 60 kilos, si, inaccesible, pero el súper agente portugués tendrá que ganarse su buen sueldo para hacer que salga, si es el caso, por la cantidad que el Valencia pueda pagar. Porque el Valencia lo quiere, y en enero.

Las razones del fichaje:

Es un jugador que puede actuar en banda, incluso cambiada, y como segunda punta, porque tiene llegada y gol. Su envergadura, 1,79, le permite tener cuerpo para poder pelear con defensas fuertes, y todavía está por terminar de hacer en el apartado físico, aunque lo importante, las cualidades innatas para jugar a fútbol, las tiene. Que puede actuar en los dos costados es vital, ya que permitiría a Nani el cambiar de banda, algo que le gusta, e incluso actuar de segunda punta, que por el gol que tiene vendría muy bien. Ahora mismo es un proyecto inacabado de jugador, todavía tiene 19 años, y que se rematara en el Valencia daría un valor extra, no cabe duda. No se trata de hablar del nuevo Cristiano, algo que seguro llegará porque en algunas cosas recuerda al jugador del Madrid (que estuvo a un café de fichar por el Valencia, por cierto), pero dentro de dos años, Guedes será totalmente prohibitivo salvo para clubes que puedan gastarse 300 millones de euros en un verano, que no hay muchos, pero los hay.