El nuevo Valencia, el que responde y ya no se calla más

El Valencia Club de Fútbol ha sacado las uñas, ya no se calla más, ya no aguanta tanto ataque de tantos sitios ni de tanta gente, y después de mucho tiempo sin contestar nunca a verdaderas burradas, el club de Peter Lim ha dicho basta. Quien piense que la salida de Jesús García Pitarch el otro día es sólo idea suya, o que la entrevista en Superdeporte es fruto de la casualidad, está claro que no sabe por dónde va, porque el club, aunque alguno no lo crea o le moleste, también puede tener una política de comunicación agresiva, que ya iba siendo hora, por cierto. Que los medios atices, algunos ya por costumbre de los años, pase, que la prensa de otros lugares lo haga, también, que glorias del pasado no tan lejano también tengan ese vicio cansa. Y todo junto, y después de un partido como el del sábado, ha hecho que la paciencia y el aguante se hayan terminado.

Hay quien no está de acuerdo, lo tengo claro, como tengo claro que si nadie hubiera dicho nada también habría voces en contra, pero es que llega un momento en el que hay que parar ciertas cosas y a cierta gente, o al menos que tengan claro que todo lo que se dice no es gratis ni tiene consecuencias. En definitiva, que a todos se nos ve el plumero, entre otras cosas, porque todos conocemos el plumero de todos. Queda un poco raro pero creo que se entiende. Quien no comparte que el club también ataque lo entiendo, pero no lo comparto. Si todo vale en una dirección, debe valer también en la otra. A mi me gusta que el club actúe así, lo siento, soy un tipo raro.

Qué bonita es la pelota. Esa que pone a cada uno en su sitio. Se carga populistas, mentirosos... y a sus tocayos los pelotas.

— SANTIAGO CAÑIZARES (@santicanizares) 25 de octubre de 2016

Albelda: "Cuando era jugador agradecía declaraciones como la de Pitarch, pero hoy en día como aficionado, tal vez no". Oh, qué sorpresa.

— VCF Forever (@VCForever) 24 de octubre de 2016