Filip Kostic se va a Stuttgart para decirle al club que facilite su fichaje por el Valencia

Ha terminado de jugar los amistosos con Serbia y no tendrá vacaciones hasta el club alemán no cierre su traspaso por el Valencia

Toni Hernández | 07 JUN. 2016 | 00:02

Filip Kostic quiere ser el primer fichaje del Valencia 2016/2017, o el segundo, pero sin duda, quiere ser jugador del club de Peter Lim, y por ello forzó hace un mes para que las negociaciones a falta del OK del Stuttgart se cerrasen, algo que hizo que Jesús García Pitarch pudiera olvidar el tema de Cheryshev. El acuerdo entre los de Mestalla y el jugador es total, y ahora "sólo" falta cerrar la cantidad con el conjunto alemán, que llegaba hace dos meses a exigir más de 20 millones de euros a varios clubes de la Bundesliga, pero todavía no había descendido, algo que ahora le hace perder toda su fuerza. Quieren sacarlo fuera del país germano, el Valencia es el mejor colocado y tiene el acuerdo con Kostic, y ahora es el propio jugador el que va a coger el toro por los cuernos e ir a los dirigentes de su actual equipo que lleguen rápido a un acuerdo.

Es el futbolista de banda que quiere García Pitarch y tiene el total y absoluto OK de Pako Ayestarán. Se le considera un jugador con un potencial extraordinario, que con esas características de juego reune el perfil de futbolista que pone en pie estadios, y eso es algo que el Valencia necesita. Potencia, velocidad, y bien aprovechada su posición, hasta con gol. Se parece a Vicente Rodríguez, pero en muchas cosas es similar al Piojo López, que llegó como segunda punta aunque en Valencia jugaba como extremo, hasta que Ranieri le colocó de punta nato, y con su velocidad destrozaba a las defensas contrarias como quería y cuando quería. No se trata de llevar a cabo una comparativa, porque entre otras cosas sería injusta, pero lo cierto es que sus condiciones físicas son extraordinarias, y hablando de un jugador de apenas 23 años, ya acumula más de 100 partidos y 20 goles entre Holanda y Alemania en Primera División. Cuando Claudio llegó a Valencia sumaba 116 partidos y 25 goles con Racing, a los 22 años. Cifras y edades casi idénticas.

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La llegada de Kostic, de jugadores en definitiva que ayuden a limpiar el ambiente que anda un tanto viciado en Valencia, se antoja muy importante para ir renovando la ilusión en una afición que está tocada, pero que se ha levantado de años mucho peores que este. Que haya además un futbolista que quiere de verdad jugar en el Valencia, que a va arriesgar y exigirle a su club que le venda porque quiere venir a Mestalla, es algo que debemos valorar, el entorno y los aficionados. Buenos jugadores que quieran jugar en mi equipo nunca sobran. Vienen días claves para Kostic y su futuro como jugador del Valencia.