Valoración de los entrenadores del Valencia 2015/2016

El Valencia 2015/2016 ha tenido nada menos que cuatro entrenadores, empezando con Nuno hasta la derrota contra el Sevilla en noviembre, Voro dos partidos mientras se esperaba a Gary Neville, que empezó en Eibar y terminó en el parón de selecciones tras perder con el Celta en Mestalla y el categórico "Gary, vete ya", y Pako Ayestarán, que empezó con toda la mala suerte del mundo contra Las Palmas, pero ganando al Sevilla y al Barcelona ha dejado la salvación totalmente cerrada, y hasta el mensaje de García Pitarch sobre que es la primera opción de cara al Valencia 2016/2017. Además del trabajo de cada uno, especialmente el del inglés, la implicación de la plantilla en determinados momentos ha sido la clave para el rendimiento de cada uno.

Nuno: su exceso de poder en verano generó tensiones innecesarias, conflictos que se podían haber evitado, pero lo más grave, una planificación deportiva deficiente, por encima de su capacidad de dirigir al equipo, que en teoría era la misma que el año anterior, cuando llevó al Valencia a la Champions. El clima enrarecido más que los resultados y lo cerca o lejos de Europa que se estaba propició su salida, que viendo cómo fue con Neville, hasta igual fue mala.

Voro: la solución de emergencia en el entreacto que llevó de Nuno a Neville. Un par de partidos, uno ante el Barcelona, con una victoria y un empate. En ningún caso, nadie contaba con él en caso de caer Neville, y así fue, porque cuando el inglés fue cesado, su puesto lo ocupo Pako Ayestarán.

Gary Neville: sólo ver el nombre será complicado en los próximos años, con lo que analizar su paso por el Valencia se antoja delicado, mucho. A favor que apostó por la gente de la casa y tuvo cierto sentido de club, algo que muchas veces ha faltado en los que han estado en su puesto. En contra, casi todo lo demás. No estaba preparado, pero no le acompañó ni la suerte ni la plantilla, y cuando todo eso lo tienes en contra, triunfar es imposible, sin el casi. Totalmente imposible.

Pako Ayestarán: un símbolo del club, un tipo importante en la mejor época deportiva de la historia, ahora en la fase, primero de ayudante y luego de entrenador jefe, una labor que lleva ejerciendo fuera de España varios años. Tiene cosas a favor, sin duda, y eso ha llegado a la plantilla, y en contra, como su inexperiencia, algo que se lleva achacando a los que han pasado por el banquillo de Mestalla desde que se marchó Unai: Pellegrino, Pizzi, Djukic, Nuno, Neville... Salvo Valverde, que no siguió, a todos les pasaba lo mismo. Quizá sea el futuro en el banquillo, pero si no es así, el Valencia deberñía hacer todo para que continuara en cualquier otra área.