Jaume conquista Mestalla

El portero valenciano ha tenido buenas actuaciones en el 90% de sus partidods y ha sido clave a la hora de no encajar goles importantes

Nacho Ballester | 18 OCT. 2015 | 12:46

Jaume Domènech volvió a vivir una noche mágica con el Valencia CF en el partido ante el Málaga CF. El portero de Almenara estuvo perfecto en todas sus acciones y además logró detener un penalti que hubiera supuesto el 2-1 momentos antes del descanso, lo que hubiera sido un auténtico palo de haber entrado. Sus compañeros de equipo corrieron a celebrarlo con él porque sabían la importancia del mismo. Jaume se ha ganado el resto de toda la plantilla y de los aficionados cuajando un mes sensacional bajo palos. Nadie puede tener ya dudas de si vuelve Ryan o si Yoel merecía oportunidades por tener experiencia en primera, porque a Jaume ahora va a ser imposible que lo mueva nadie.

El recorrido de Jaume en primera empezaba hace poco más de un mes con su debut oficial en la liga BBVA ante el Sporting de Gijón. El de Almenara se hizo grande parando absolutamente todos los ataques del cuadro de Abelardo. Al Valencia le llegaron por todos los lados y Jaume se lució parando una tras otra para desgracia del contrario. Paco Alcácer aprovechó una jugada aislada en el último minuto para marcar el gol de la victoria, pero el ídolo del encuentro estaba bajo los palos. Desde ese día nadie ha podido frenar la gran progresión de Jaume. El Zenit y el Betis visitaron Mestalla en dos partidos muy distintos para Jaume. Hulk le amargó la noche con dos disparos imparables. El Betis no generó ocasiones claras y las pocas que tuvo se salvaron con tranquilidad por parte de Jaume.

El día del Espanyol, Jaume salvó al Valencia de salir goleado de Cornellà. Mostró una gran mejoría en los balones aéreos y tapó grandes disparos como un a bocajarro de Caicedo. Ante el Granada también estuvo muy seguro y el equipo no encajó goles pese a que pudieron hacerlo. Y llegó el gran examen para Jaume: Gerland/Olympique de Lyon. Aquí es el lugar que Jaume recordará como el día en el que se consagró como portero y el día en el que se presentó a Europa. En la retina de los aficionados quedará para siempre la parada de Jaume en la falta directa de Valbuena o las tres paradas consecutivas en los minutos finales del encuentro. Fue el auténtico salvador.

El partido ante el Athletic quizá pudo hacer algo más, pero los leones se hicieron con el partido tras empatar y ya nadie pudo pararlos. Quizá haya sido uno de los partidos más "normales" de Jaume. Nuno y toda la plantilla esperan que siga a este nivel mucho tiempo.