Nuno sigue fiel a la 'mano izquierda' cuando vienen mal dadas

Mientras la racha al principio de Liga seguía sorprendiendo a propios y extraños, una de las preguntas dentro de la hinchada valencianista buscaba saber qué reacción tendría Nuno Espírito Santo cuando se perdiese algún partido. El técnico luso apenas ha sufrido tres derrotas este año, pero ni en esas ocasiones ni cuando el equipo ha mostrado mala imagen ha ejercido la autocrítica para consigo o con sus futbolistas en sus ruedas de prensa.

"Esto es la Copa del Rey. Es una competición que tiene estos partidos, la reacción ha sido fantástica y estamos muy contentos y felices por haber pasado". Con este breve análisis despachó Nuno el pasado martes por la noche lo que se había convertido, tras media hora de fútbol infame, en una de las campanadas de la actual edición de la Copa. El Rayo ganaba al descanso 1-3, Mestalla silbaba a los suyos y el equipo parecía deambular perdido y sin rumbo sobre el césped. Los cambios en el entretiempo, la mayor agresividad y la calidad individual, así como alguna decisión controvertida por parte del colegiado, bastaron en el segundo acto para salvar el 'match-ball' de una eliminación que hubiese incendiado el club a pocos días de las vacaciones de Navidad.

La palabras del técnico, sin hacer sangre por el juego de su equipo y "satisfecho con la actitud de los jugadores", fueron muy similares a las pronunciadas poco más de una semana antes, tras otra mala actuación de los suyos en un partido difícil de digerir para cualquier aficionado ante el Granada (1-1). Entonces, el portugués aseveró, para sorpresa de todo aquel que vio el choque, que se les había escapado "una victoria que era merecida" y que el Valencia había sido "el mejor equipo después de un partido intenso". "En las ultimas jornadas estamos jugando y siendo mejores que el rival pero no ganamos. Es un empate que sabe a derrota", dijo el preparador, para sorpresa de los presentes en la sala de prensa de Los Cármenes.

Otro ejemplo, un poco más atrás, tuvo lugar en la sala de prensa de Vallecas tras el triunfo valencianista en la ida copera: el equipo sufrió un 'meneo' a manos del Rayo en la recta final de la primera mitad, aunque dos fogonazos en la recta final del choque lograron darle la vuelta al choque y poner en franquía la eliminatoria (1-2). "Hoy hemos visto a un Valencia que remonta los partidos y remontar un partido aquí en Vallecas tiene mucho valor", se limitó a decir el técnico tras el choque. Nuno afrontaba la Copa del Rey tras haber visto como el FC Barcelona ponía en jaque aquella afirmación contundente tras la primera derrota del año en A Coruña (3-0): "El Valencia, un equipo que quiere estar en Champions, no va a tener dos derrotas seguidas. Lo aseguro".

Para desgracia del portugués, el equipo sí enlazó dos derrotas seguidas: ante el Levante (2-1), inmerecida a su juicio ("hemos sido superiores, cuesta entender esta derrota"), y ante el FC Barcelona (0-1). Esta última, tras haber merecido la victoria frente a los de Luis Enrique. "Sí, hemos perdido dos partidos seguidos. Me he equivocado. Estoy muy jodido, y el vestuario también", lamentó el entrenador valencianista.

Nuno, eso sí, reserva gran parte de sus apuntes y reproches para uso interno después de cada tropezón. Ocurrió tras lo de Granada, y días atrás con una reflexión contundente horas después de caer en el derbi ante el Levante: "Lo hicimos todo", comentó el portugués tras formar un círculo con sus hombres en el campo de entrenamiento. Nuno prefiere, como pudo verse en el entrenamiento posterior al 4-4 de locos ante el Rayo en Copa, las charlas en el vestuario, el intercambio de impresiones y los debates cara a cara de forma individualizada con sus hombres de referencia en la plantilla. Ningún 'palo' a la plantilla en público en toda la temporada, pese a tener motivos para ello. Ese es, por ahora, el mantra predicado por el 'nunismo'.