La LFP y la meteorología convierten Mestalla en un 'horno'

La goleada del Valencia al Espanyol (3-1) fue motivo de felicidad para la parroquia blanquinegra, aunque hubo de sufrir para poder verla en su totalidad. Los aficionados valencianistas, especialmente aquellos ubicados en Grada Central, tuvieron que soportar temperaturas elevadísimas durante el partido.

A las cinco de la tarde, los servicios meteorológicos apuntaban a 30 grados de temperatura y picos de humedad superiores al 50% que aumentaban la sensación térmica, provocando que varios seguidores tuviesen que ser atendidos por los servicios de la Cruz Roja debido a golpes de calor.

"Llevo como socio desde 1990, y jamás había visto tal desbandada de gente al descanso buscando sombra", reflexiona Raul Cuello, un espectador del choque. "En la vida había sudado tanto en Mestalla como hoy", apuntaba Erik Boluda, también presente en la grada. "Me dejo 400 euros en mi abono para irme al descanso al borde de la insolación. Fue inhumano", remataba Jonathan Fenollar, indignado por el calor que pasó en su asiento,

Lo cierto es que las altas temperaturas que se están viviendo en la Comunitat Valenciana en las últimas semanas no han sido tenidas en cuenta por parte de la Liga de Fútbol Profesional, que también ha designado un horario similar -las cuatro de la tarde- para el choque de la séptima jornada entre Valencia y Atlético de Madrid, el próximo 4 de octubre. Se espera que, para entonces, la ola de calor ya haya pasado.

Hace dos temporadas, en circunstancias similares, se hubo de lamentar un trágico suceso en el estadio Ciutat de Valencia, cuando un aficionado de 82 años falleció producto de un infarto en la Grada Central del coliseo granota. El asfixiante calor contribuyó al triste desenlace.

Aquella tarde de 24 de septiembre, en la que Levante y Real Sociedad disputaron el choque a las 16:00 horas, también se vivió otro 'susto' cuando Iborra padeció una lipotimia al descanso producto de las altas temperaturas.