Salvo se vuelve a enrocar y no cede información a KPMG

La venta del Valencia CF parece que será de todo menos fácil. Si durante la pasada semana todo indicaba que la tregua estaba pactada y la Fundación lideraría el proceso de venta de la mano de Aurelio Martínez y con el beneplácito de Amadeo Salvo, parece que la situación dista mucho de ser la adecuada. El presidente del conjunto valencianista, liderando los intereses del conjunto de Mestalla, reclama conocer la identidad de los inversores para poder seguir con el proceso de venta.

La idea de Salvo no es otra que dar la información de los últimos meses en el cargo a todos aquellos inversores que se identifiquen. La idea de dársela a KPMG o volcarla en un disco duro no satisface la idea de un presidente que deja claro que aunque se marchará "gratis igual que vino" no dejará títere con cabeza si divisa alguna irregularidad en el proceso. Cosas que matizó durante la última comparecencia del consejo de administración en la que instó a Bankia a ser igual de transparente que él.

Precisamente la entidad bancaria pareció recoger el guante con las declaraciones de Goirigolzarri en varios medios en las que hablaba del proceso de venta con la tranquilidad de "tener una postura firme y clara desde el principio" y con una venta "liderada por la Fundación".

Sea como fuere, todo indica que la nueva gestora -que todavía no está formada- tardará algo más de unos días en hacerse y parece poco viable que el 24 de febrero en primera instancia o el 3 de marzo en segunda, se realice alguna operación.