Nueva demostración del rodillo taronja

Valencia Basket sinónimo de victoria (92-67)

Daniel Pardo | 11 ENE. 2014 | 19:56

Otra victoria más para el Valencia Basket. El Iberostar Tenerife pasó sin pena ni gloria por la Fonteta, territorio inexpugnable en Liga Endesa este año, excepto para el Real Madrid, y sabemos todos como fue el ese encuentro. Nos estamos malacostumbrando en la capital levantina a ver baloncesto de muchos quilates. Este equipo debería ser de Euroliga ante la evolución imparable que ha demostrado.

Ese cambio entre ganar como meta a ganar como costumbre es lo que mejor resumen el partido de esta tarde. Desde el primer minuto fueron los tinerfeños por detrás en el marcador; la rutina de los taronjas es un símil de la rutina diaria; como el que entra a trabajar y se pone a ello, los de Perasovic reciben el primer balón y se ponen a su tarea; ganar. El primer cuarto pudo ser un pequeño aliciente para los escépticos, con +10 de diferencia (21-11) y un Iberostar que bien sabía lo que se les venía encima. Bojan Dubljevic ha vuelto más dominante, y sus 7 puntos en escasos minutos dan fe de ello. Todos los integrantes de la plantilla son merecedores de ser destacados. Empezando por el aporte y criterio de Van Rossom, el acierto exterior de Barton o Lafayette y terminando en la clase inimitable del MVP de la liga Justin Doellman. Los siguientes 10 minutos fueron tónica similar de cada cuarto, con 3 triples de Barton y Pau Ribas llamando al espectáculo.

Espectáculo era verlo, ver como decidía lo que quería anotar y cuando lo quería anotar, de dos y un triple en la siguiente jugada para tener tiros libres en la tercera, pura magia. Se llegó al descanso con 51-29 y una Fonteta que se siente tan grande como su equipo. Comenzó el tercero con un cambio provisional de roles, con lo que esta vez Rafa y Sato fueron las estrellas, que satisfacción ver como cada vez es uno el que asume el peso del partido, a eso se le llama implicación y diversidad de opciones. Llegando a los +30 (67-37) el Valencia Basket quería más, ambición en grandes dosis para acabar 76-46 de la mano de Bojan Dubljevic con 15 puntos y 11 rebotes en 17 minutos, estelar.

Finalmente el último cuarto sirvió para ver en acción a la perla taronja, Pablo Pérez, y para rubricar el mejor inicio de la historia del equipo de Velimir Perasovic. El 92-67 no sorprende; no sorprende que un equipo haga únicamente 46 puntos en 30 minutos, tampoco lo hace que 92 puntos sea el promedio anotador, ni mucho menos el ganar 13 partidos de 15. Aunque, puede que sorprenda el hecho de que sólo han perdido frente a Barcelona y Madrid (de un punto, y sin merecerlo respectivamente). Lo dicho, la rutina se ha asentado en la Fonteta, este equipo aspira muy alto.