El Levante no pasa del empate en Almería (2-2)

Dando imagen de equipo sólido, así consiguió el Levante empatar y casi ganar el partido.

Daniel Pardo | 22 SEPT. 2013 | 00:02

A las puertas del segundo triunfo como local se quedó en la tarde de hoy el Levante. Tras la hazaña sumamente meritoria de remontar un 2-0 adverso en campo ajeno, el Levante llegó a colocarse con 2-2 en el marcador y toda una parte por jugar prácticamente.

Empecemos por el principio, el Almeria actualmente es un equipo muy necesitado de puntuar, y cuya visión del choque era plenamente optimista. Suso y Rodri comandaron a los almerienses durante el primer acto; mención aparte lo del joven Suso, cuya calidad es innata y la proyección que atesora puede convertirlo en un nuevo Isco. El Levante jugó de tu a tu durante los primeros 45 minutos, con un tal Pape Diop que actualmente es el jugador franquicia de los de Orriols, y no me cansaré de repetirlo.

Diop jugando fácil y recuperando una barbaridad de balones conseguía él solo dominar el centro del campo. Su presencia es notoria, y cuando ves un partido del Levante es evidente la cantidad de campo que abarca el senegalés, es como si los granotas jugaran con tres medios defensivos cuando en realidad es un solo jugador el que hace esa función. Entre ocasiones de unos y otros andaba la cosa, primero con varios disparos de Suso que obligaban a intervenir como mandan los cánones al portero titular de una selección mundialista como es Costa rica. Aunque no se veían inferiores los de Joaquín Caparrós, todo lo contrario ya que Babá (muy desacertado en todo el partido) e Ivanschitz pusieron en importantes apuros al Esteban.

Todo salía como estaba planeado, hasta que Juanfran provocó un penalti absurdo en tiempo de prolongación de la primera parte, que se convirtió en el primer gol de la tarde.

Tras el descanso volvió a adelantarse el Almeria. Pero cuando el resto de equipos de primera estarían desbordados ante tal situación, se demostró que el Levante no es como la mayoría. Se noto la garra que exige Caparrós a los suyos, y acortaron distancias de penalti, que unido a la expulsión de un jugador local, favoreció el empuje que demostraban los visitantes.

Acto seguido Diop metía el gol de la jornada, empatando el partido con media hora por delante, aunque el marcador no se movió en parte gracias a que el Almeria cerró filas entorno a su portería, haciendo varios cambios defensivos a ultranza que los levantinistas no pudieron solucionar.

Finalmente el empate a dos perduró hasta la fin del encuentro. Buen partido y buen punto que sabe bastante bien después de verle los dientes al lobo para acabar casi cazándolo. Ejemplo de lucha y tenacidad la que demostró el Levante hoy en Almería, que tomen nota otros equipos de la moraleja que nos han dejado hoy en bandeja: Un gran esfuerzo siempre conlleva una gran recompensa.