Djukic, pon orden en el vestuario

Miroslav Djukic tiene un trabajo importante con su vestuario tanto en el plano deportivo como en el emocional. El técnico del Valencia ha tenido que apagar varios fuegos (algunos ayudado por Amadeo Salvo), de varios de sus jugadores. El serbio debe evitar cualquier otra guerra interna porque el vestuario no parece estar del todo controlado.

Con todo esto no quiero pegarle un palito a Djukic, pero sí recordarle que debe ser lo más recto con los suyos para evitar que se le suban a la chepa. De palabra ya sabemos que Djukic es muy exigente con todos, el primero con él, pero de hecho aún no hemos visto quizá su mejor versión en dicha faceta de ‘padre’.

Vengo a decir todo esto por las últimas palabras de hombres como Jeremy Mathieu, Adil Rami, Vicente Guaita o Fede Cartabia. Sinceramente, quiere sacar del mismo saco al joven argentino porque creo que no ha estado bien asesorado y la inexperiencia en estos casos puede jugarte malas pasadas. Lo de Mathieu y Guaita no tiene perdón de Dios.

El lateral francés se atrevió a decir en rueda de prensa que no quería volver a jugar de lateral, algo que puede sorprender más o menos a los que le conocen bien. “Tú jugarás donde te diga el entrenador”, digo yo. El propio Amadeo Salvo le respondió al galo de forma pública: “Mathieu ya conoce sus condiciones por si quiere marcharse, espero que haya sido un calentón”.

Djukic le restó importancia al comentario de Mathieu y luego lo puso de titular como lateral zurdo. Esa decisión me gustó bastante y, por supuesto, la aplaudo. A este tipo de cosas me refiero cuando habla de hechos y no de palabras. Debe enderezar a sus jugadores a la vez que los motiva.

El caso de Adil Rami fue todavía más llamativo porque Djukic vino a decir que el “francés tenía que hablar más dentro del campo y menos fuera”. Ese palito fue considerable, aunque luego Rami lo ha jugado todo y no ha tenido ningún tipo de castigo o similar hasta el momento. Aprovecho para decir que Mathieu se quejó abiertamente de que “había compañeros que pidieron salir y ahora están jugando de titulares”.

Por último y para mí, el más problemático es el caso de Vicente Guaita. El entrenador serbio ha sido claro y fiel a sus ideas bajo la portería con Diego Alves y no se ha amedrentado ante las continuas quejas de Vicente Guaita. Juega Alves y punto. La actitud de Guaita está siendo algo infantil y de poco ‘luchador’. Aquí también entró Amadeo Salvo cuando respondió al posible interés de Guaita en salir del Valencia: “Nosotros no queremos vender a Guaita. Si Guaita quiere marcharse que lo diga”. Bien dicho.

En el caso del guardameta de Torrent me faltó algo de dureza pública por parte de Djukic, pero reconozco que en lo deportivo se ha mantenido fiel hasta el momento con Diego Alves. Si llega el momento de rotar, que sea por el buen papel de Guaita en los entrenamientos y no por sus continuas protestas. Señor Djukic, ponga orden en el vestuario. Confío en que sabrá hacerlo lo mejor posible.