Las camisetas más polémicas de la historia del Valencia CF

El Valencia presentó el pasado viernes las nuevas equipaciones para la temporada 2013-14, un diseño que ha generado polémica debido sobre todo a la elección de los colores blanco y negro para el escudo.

El club ha decidido dotar a la camiseta del primer equipaje de un detalle al que califica como "retro", algo con lo que una gran parte de la afición no está de acuerdo, ya que los colores del escudo de la entidad nunca fueron el blanco y negro. Pese a que los cambios de diseño son esenciales para mantener una estrategia de marketing coherente, no es necesario atentar frente a símbolos que no deberían sufrir modificaciones; el escudo es sin duda uno de ellos. Pero la camiseta 2013-14 no es la primera que ha generado división de opiniones en la historia. Repasamos algunos de los diseños de equipaje más polémicos del valencianismo.

1994-95, la droguería de las "estrellas"

Era verano de 1994 y aquella tarde arrancaba el primer proyecto de Francisco Roig. Mestalla registraba un lleno espectacular ya que se presentaba el primer equipo con el reciente campeón del mundo Carlos Alberto Parreira y el Pichichi del campeonato Oleg Salenko a la cabeza. Sería un acto espectacular, pionero en nuestro país. Los jugadores fueron saliendo uno a uno, con Andoni Zubizarreta, Mijatovic o el cuerpo técnico como estrellas. Pero si el equipo era realmente ilusionante, no lo lo fue tanto la camiseta que lucían los jugadores; el logotipo de la marca de droguerías CIP se instauró en la solapa del uniforme del equipo. Una broma... pensaron algunos seguidores, esperanzados de que aquella visión solo fuera producto del acuerdo publicitario de una tarde, pero no. El Valencia lució aquella camiseta durante toda la temporada, una campaña que finalizó con la final del agua en Madrid.

1999-2000, experimento fallido

El Valencia había vuelto a ganar un título importante tras casi dos décadas de sequía. Eran buenos tiempos para la mercadotecnia y el club estaba dispuesto a explotar todo su potencial publicitario y económico. Se pensó en un uniforme innovador que pudiera acompañar al blanco de la primera equipación y el exitoso naranja de la segunda, pero la elección fue elegida sin pensar demasiado en las consecuencias. El Valencia debutó en la fase previa de la liga de Campeones vistiendo una camiseta experimental pero con muy poco tirón entre los seguidores; el negro y gris combinado con pequeñas franjas horizontales naranjas escandalizó a parte de los aficionados.

1996-97, el Ford Ka del Valencia se pasa de frenada

Tras la psicosis generada por el modelo CIP, el Valencia migró a un aceptable prototipo en el que la multinacional Ford pasaba a patrocinar al club. Se logró el subcampeonato de liga en 1995-96, pero un año después se decidió que el Valencia promocionara uno de los modelos de coche de la empresa, el conocido y novedoso Ford Ka, por lo que el equipo lució una nueva imagen durante varios encuentros. Sin llegar a niveles anteriores, el uniforme no gustó demasiado a los aficionados, pero el hecho de que su uso fuera muy puntual tampoco llevó a la indignación general.

1993-94, la camiseta que alargó el día de difuntos

La camiseta con el logo de Mediterrania perteneciente a 1993-94 es una de las más recordadas por los aficionados. Emblemática y singular, la publicidad quedaba incrustada como si de una mancha se tratara. Pero si el diseño de la primera equipación podía generar dudas, no lo hacían así la segunda y la tercera. El granate elegido por el Valencia como color para su segunda camiseta tuvo poca vida, pero si un modelo quedó relegado para siempre al ostracismo fue el que tenía un color a mitad camino entre el azul oscuro y el negro. Esta zamarra era problemática ya que llegaba a confundirse en ocasiones con el riguroso negro que lucían los árbitros. Además fue la camiseta que vistieron los hombres de Guus Hiddink en el fatídico 7-0 de Karlsruhe del 3 de Noviembre de 1993.

Azul claro, color de moda en las segundas equipaciones de principio de los noventa

A inicio de los años noventa, un Valencia patrocinado por la Caja de Ahorros y vestido por Puma, se atrevió con un curioso diseño azul celeste que causó un gran impacto entre los aficionados. El color ya había sido elegido por otros equipos como el Barça para su segunda equipación en años precedentes, y a pesar de que chocaba de manera clara con la tradición, sí que gustó a algunos valencianistas ya que combinaba un atractivo color que se relacionaba con el mar y motivos de la senyera valenciana.

Dos patrocinadores principales en la misma camiseta

Durante la primera temporada de Unai Emery dirigiendo al Valencia Club de Fútbol, el club tuvo que hacer frente al impago del primer plazo acordado con la empresa "Valencia Experience", a la que demandó por la falta de avales que garantizaran el contrato suscrito. Tras el fiasco se negoció con la casa de apuestas Unibet, que rápidamente llegó a un acuerdo con la entidad de Metalla. Por esta razón el Valencia lució en su camiseta a dos patrocinadores durante gran parte de la temporada: el oficial y el moroso.

Otros diseños y diferentes colores

A los tradicionales colores blanco y negro que siempre han imperado en las camisetas del Valencia les han acompañado otros. Desde los conocidos naranja y azul, con toques de la senyera valenciana o completamente engalanados de ella, hasta el granate de los noventa o el rojo de finales de los setenta. Incluso en alguna ocasión el Valencia llegó a vestir de verde como podemos ver en la siguiente imagen. Mucho ha cambiado el estilo de una camiseta que seguirá dando que hablar durante las próximas décadas.