Zona Champions, un objetivo por encima de la realidad

Manolo Llorente, Braulio Vázquez y Mauricio Pellegrino se sentaron a principios de la pretemporada para pactar el objetivo principal y este no era otro que volver a clasificarse para la Champions League, algo imprescindible para la viabilidad económica del Valencia Club de Fútbol.

Llegados a este punto de la temporada, con 16 jornadas disputadas, el Valencia es decimoprimero con 21 puntos, a 7 puntos del Málaga, cuarto clasificado. Ya sin Pellegrino, pero con Llorente pese a la insistencia del graderío (volvieron a cantar el ‘Llorente vete ya’), la cosa se está poniendo muy fea para lograr los objetivos. La estrategia del presidente blanquinegro de vender y vender y fichar jugadores de segundo nivel ya no le está funcionando y el equipo se está mostrando más irregular que nunca.

La distancia de 7 puntos no parece una locura numérica, pero desgraciadamente la distancia de nivel es mucho mayor si comparamos el juego actual del Valencia con el Málaga, y eso que los de Pellegrini tampoco están para tirar cohetes.

Ernesto Valverde ya está empezando a dotar al equipo con detalles que no tenía como el presionar más arriba o el sacar de lateral zurdo al mexicano Andrés Guardado y no a Cissokho, único lateral de la plantilla disponible y fichado por Braulio. ¿Palito indirecto al director deportivo?

El caso es que el txingurri quiere meter al equipo en Champions para tener la opción de renovar su contrato que, recordemos, es de seis meses sin ninguna cláusula automática. Entendemos que le renovarían en tal caso, ya que, a día de hoy, meterse en Liga de Campeones no parece precisamente fácil.

Al Valencia le faltó de todo ante el Rayo, juego, creatividad, gol pero no le faltó orden, algo que, por lo menos, le hizo estar vivo en el encuentro hasta los minutos finales en los que se produjo la desgraciada jugada del penalti de Tino Costa. Personalmente creo que Adil Rami fue de lo mejorcito en defensa junto con Ricardo Costa. Por otra parte reiterar una vez más que Barragán no está para jugar en el Valencia y ya veremos si está para jugar en primera división. Es tan duro como real.

Valverde tiene muchísimo trabajo por delante y esperemos que pueda salirle bien para levantar a un equipo que va en caída libre desde que empezó la temporada. Es intolerable fallar en Mestalla ante rivales como Real Sociedad o Rayo Vallecano, con todo el respeto del mundo hacia ellos.

Llorente va a pasar unos días muy malos hasta el próximo viernes, día que se cierra el año futbolístico con el Valencia - Getafe en Mestalla. Si el equipo che no gana ese partido, la situación tiene pinta de volverse absolutamente revolucionaría con todo el estadio coreando la cancioncita de moda: ‘Llorente vete ya’.