David Navarro estuvo a punto de arrepentirse

David Navarro ya es jugador del Levante, pero la primera ha sido en la frente. El club tenía dudas por los informes negativos que había recopilado sobre su personalidad y que quedaron al descubierto el primer día. Fuentes que lo conocían de primera mano de su estancia en el Valencia CF le habían recomendado a Manolo Salvador que no lo metiera en el vestuario. Le avisaron de lo problemático que puede llegar a ser cuando no juega y le hablaron de una personalidad muy peculiar que los granotas conocieron ayer de primera mano. Y es que al club casi se le indigesta que el futbolista filtrase en varios medios que seguía esperando una oferta de China cuando los de Orriols habían anunciado ya oficialmente su fichaje. A Quico Catalán no le llegaba la camisa al cuello.

De acuerdo con el club, el fichaje se anunció el domingo con el consentimiento de Navarro y de su representante, José María Orobitg. Es cierto que a esas horas aún no había firmado, a la espera de la revisión médica, pero el acuerdo estaba ya cerrado. Sin embargo, el central de Port de Sagunt aireó off the record a través de varios altavoces su malestar por el hecho de que, según su versión, el Levante hubiese informado de su fichaje antes de hora. Todo apuntaba a que sería jugador granota, pero no era seguro.

La confusa situación alertó al club, en peligro de quedarse colgado. De buenas a primeras se daba de bruces con el peculiar estilo de su última adquisición. Con mucha incredulidad, desde Orriols alucinaban: “¿Qué necesidad tiene de decir eso si va a venir?. Aquí nadie entiende lo que está pasando?”. A la velocidad de la pólvora, lo cierto es que el revuelo que se montó obligó al departamento de comunicación a coger a Navarro por banda y obligarle a hacer unas declaraciones de mala gana confirmando su fichaje. La web oficial las colgaba escasos minutos antes del partido en el Bernabéu.

Pese al sainete, y tal y como estaba previsto, Navarro ha firmado esta mañana su contrato tras pasar la revisión médica. El central ha conocido también a Juan Ignacio Martínez y ha saludado a sus nuevos compañeros, aunque con muchos de ellos lleva toda la semana hablando. Finalmente, como adelantó ‘deportevalenciano’, su contrato es sólo hasta final de temporada, pese a que la intención del club es convencerlo para que lo prorrogue siempre y cuando, eso sí, no vuelvan a haber más malentendidos.