Farinós, el ¿intocable?

JIM hace oídos sordos a las críticas

Rafa Carretero | 09 FEB. 2012 | 18:41

Pese a sus malos partidos, Farinós está aguantando en el once titular contra viento y marea. Pero, la pregunta es: ¿hasta cuándo?. La presión sobre Juan Ignacio Martínez empieza a ser insoportable no sólo desde la grada. Incluso desde dentro del club se le ha invitado a que reflexione sobre su continuidad. El equipo se está viniendo abajo por la medular y ahí el de La Torre se presenta como uno de los grandes damnificados.

Xavi Torres e Iborra han ido alternándose como sus acompañantes, especialmente el primero. Ambos forman el doble pivote que con los números en la mano mejores resultados le ha dado el Levante. Sin embargo, estando bien físicamente, Farinós es un intocable para JIM, que solicitó su fichaje el pasado verano. “Es el Xavi de la Segunda División”, le dijo a Manolo Salvador. De hecho, desde que tras la derrota en Pamplona, la primera del año (2-0), entró por primera vez en el equipo, sólo se ha ausentado por culpa de las lesiones. El subtítulo del “protegido” del míster lo persigue noche y día.

Farinós es el futbolista de mayor calidad en el centro del campo, pero eso no es suficiente. Su despliegue físico no es del antaño y en las últimas jornadas ha estado especialmente fallón, tanto en la creación, como en las entregas y en las marcas. La grada se ha decantado claramente por Iborra, relegado a un segundo plano desde los problemas anímicos que le empujaron a perder la titularidad en aquellas semanas del fatídico embarazo de su pareja. El de Montcada tiene peso específico en el equipo y es una apuesta de futuro del club, al que le cuesta mucho digerir su continuada suplencia.

En realidad, que el Levante se parta por el medio es algo que ha pillado sobre aviso a los técnicos. Durante el reciente mercado de enero se habló de la opción de reforzar la medular, pero Salvador consideró que no era urgente. El director deportivo, pese a tener un nombre sobre la mesa, no hizo ningún movimiento en ese sentido, confiado en una línea que a principios de curso fue bautizada como la más competitiva de la plantilla. Sin embargo, el paso de los meses ha demostrado que ni Farinós ejerce como líder, ni Xavi e Iborra están finos a su lado. Y todo eso sin contar a Pallardó, relegado al ostracismo no por una cuestión de empeño sino de falta de calidad que es justo lo que no se pone en duda del que para muchos es, sin motivos, el ojito derecho del entrenador.