No pueden más

La plantilla del Ontinyent CF ha explotado definitivamente tras estar aguantando mucho tiempo sin cobrar varias nóminas que les adeuda del club desde el año pasado. Los jugadores de Roberto Granero han saltado hoy al césped para dar un par de vueltas de manera simbólica y se han marchado de nuevo a los vestuarios. No se entrenarán hasta que cobren lo que se les debe o por lo menos una parte. La semana pasada, el presidente de la entidad Manuel Requena informó a los jugadores de que cobrarían el día 16 de noviembre como tarde. Los futbolistas esperaron ayer hasta última hora y la transferencia no llegó, por lo que pactaron entre todos no volverse a entrenar hasta que la situación se solucione.

La situación en el equipo valenciano es límite y si no mejoran las cosas en los próximos meses los jugadores buscarían equipos en el mercado invernal para abandonar cuanto antes esta pesadilla que están viviendo en el Ontinyent.